Nunca se me ha dado bien hablar de sentímientos, asi es que prefiero escribirlos en una carta de despedida, no se sí todo esto llegaras a leerlo. Supongo que sólo serán unas hojas escritas en sucio, un par de papeles arrugados que acabaron rotos igual que yo, quizás cuando leas esto volverán aqui, o que esto no es como las películas de los sábados por la noche en donde todo termina bien.
Pensé que todo esto saldría bien, y me equivoqué. Llevó rato pensando en lo bonito que sería sí justo ahora despertara atu lado y poder verte dormir.
Se que ahora las cosas no serán fáciles y que cuando oiga el ruido del viento pensare en ti, incluso me atrevería a decir que cada vez que me miro al espejo pienso en lo mucho que te gustaba mi boca y las ganas que tenías de probar mis labios, tal vez el mundo ponga en mi contra y haga que te eché de menos. E notado que el tiempo no a importado entre nosotros , porque tenías y tienes el poder de hacerme olvidar la cosas malas y ver lo bueno de ellas. Ahora sólo me consuela saber que vas a estar aqui en mis escritos noche y día. En mis recuerdos de noche en donde me despiertan mis sueños y deslizo mi mano cuidadosamente al otro lado de la cama y ver que ya no estas, quizás está carta sea sólo un grito de auxilio para decirte que me haces falta. Espero que cuando leas puedas escuchar...
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